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jueves, 12 de junio de 2014

De diarios va hoy la cosa

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Un domingo 12 de junio de 1942 le regalaban a Anna Frank por su cumpleaños uno diario que, sin sospecharlo, se convertiría en uno de los más famosos.
"El viernes 12 de junio me desperté antes de las seis, cosa comprensible, pues era el día de mi cumpleaños. (...) A las siete fui a dar los buenos días a papá y a mamá, y por fin, en el salón, pude desempaquetar mis regalos. La primera sorpresa fuiste tú, probablemente uno de los regalos más hermosos."
Y en entrada posteriores escribía:
 "Espero poder confiártelo todo como no he podido todavía con nadie. Espero también que seas para mí un gran sostén." 

Son muchos los escritores que han mantenido diarios a lo largo de su vida. Una de ellos, fue Susan Sontag.

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En el diario no sólo me expreso más abiertamente que como podría hacerlo ante cualquier persona; me invento a mí misma. El diario es un vehículo para mi identidad. Me representa como un ser emocional y espiritualmente independiente. Por tanto, no simplemente registra mi vida diaria y real, sino que, en muchas ocasiones, me ofrece una alternativa a ella. Hay habitualmente contradicciones entre el significado de nuestras acciones hacia una persona y lo que decimos que sentimos hacia esa persona en un diario. Esto no significa que lo que hagamos sea superficial, sino que lo que nos confesamos a nosotros mismos es profundo." 


Reborn: Journals and Notebooks, 1947-1963


Mientras que Virginia Woolf, siempre tan llena de contradicciones, aunque lo consideraba "un método para practicar y ensayar el arte de escribir", también un 14 de junio, pero de 1925, escribía: 


 "Una confesión vergonzosa - Es una mañana de domingo, justo después de las diez y aquí estoy, sentada, escribiendo en mi diario y no ficción o una crítica, sin más excusa que el estado de mi mente. Después de terminar esos dos libros [La señora Dalloway y El cuarto de Jacob], uno no puede concentrarse directamente en uno nuevo." 
A writer's diary 

Kakfa no iba a ser menos y se sumó a la moda.
"Mantener un diario te hace consciente, con una claridad reconfortante, de los cambios que uno sufre constantemente (...). En el diario encuentras prueba de que una situación que hoy parece intolerable, la viviste, la observaste y escribiste sobre ella, que esta mano derecha se movió como lo hace hoy, y así podemos ser más maduros, porque somos capaces de ver nuestra anterior condición, y por esa misma razón, tengo que admitir el valor de nuestro temprano esfuerzo, en el que persistimos aún en pura ignorancia." 
Diaries, 1910-1923


Sylvia Plath decidió un 13 de noviembre de 1949 que volvería a tener un diario.

"He decidido volver a tener un diario. Un lugar donde pueda escribir mis pensamientos y opiniones cuando tenga un momento. De alguna manera quiero mantener el éxtasis de tener diecisiete. Cada día es precioso, y me pone infinitamente triste el pensamiento de todo este tiempo que se desvanece más y más lejos de mí a medida que me hago mayor. Ahora, ahora es el momento perfecto para esto." 


Otro 14 de junio, pero de un siglo totalmente distinto, Tolstoy decidía retomar su abandonado diario: 
"Después de casi dos meses, cojo mi pluma para continuar mi diario. ¡Qué difícil para un hombre bajo la influencia de lo que es malo volver a lo que es bueno!"
The diaries of Leo Tolstoy

Y Oscar Wilde, con la agudeza a la que nos tiene acostumbrados nos deja esta pequeña observación en La importancia de llamarse Ernesto:

Cecilia: Guardo un diario para poder acceder a los maravillosos secretos de mi vida. Si no los escribiese, probablemente los olvidaría.
Miss Prism: Memoria, querida Cecilia, es el diario que todos llevamos con nosotros.
Cecilia: Sí, pero habitualmente cuenta las cosas que nunca han sucedido o las que nunca podrían haber pasado.


¿Habéis leído a Ana Frank? ¿Sois de los que llevan diario o confiáis en vuestra memoria de elefante?

10 comentarios:

  1. Leí el de Ana Frank, sí, y también de Woolf y Plath (y algún otro más). Tiene un punto de voyeur, pero también te hace comprender la dimensión humana dentro de esa figuras mitificadas.
    ¿Mi memoria? Un baúl de trastos. Pero hace tiempo que decidió de llevar un diario. Soy más de asuntos momentáneo en papeles sueltos fáciles de perder ;-) Besucos.

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  2. Yo escribí un diario desde los 10 hasta los 12 y otro de los 13 a los 18. No cada día, pero sí cada vez que me pasaba algo que consideraba importante. Ahora cuando los releo me da un poco vergüenza ajena y miro por encima del hombro como si alguien más pudiera descubrirlos... Me dan ganas de volver al pasado y decirme a mi misma "Tranquila, todo va a ir bien, no es más que una tontería...". En el fondo me inspiro más ternura que otra cosa :P

    ¡Un abrazo!

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  3. He leído a Silvia Plath y me gusta mucho, pero Anna Frank ya me cuesta más.
    Besos.

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  4. El mejor diario que he leído jamás fue de Gombrowicz, aunque al mismo tiempo debo admitir que no es una lectura fácil.

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  5. De los que nombras he leído el de Anna Frank y el de Tolstoy, me gustaría leer el de Oscar Wilde.
    Cuando era pequeña sí que escribía diarios, ahora prefiero mi memoria de elefantona xD
    Un beso ;)

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  6. He leído los de Woolf, Plath y Oscar Wilde (que ahora me acuerde). Siempre he escrito cosas, pero de manera desordenada y diría que hasta descuidada, no lo llamaría estrictamente diario. Mi memoria más que de elefante es de pez, lo malo es que aun así confío en ella :S

    Una entrada muy bonita, con los fragmentos de los diarios ;)

    Besos y buen fin de semana

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  7. Síi, Ana Frank lo leí hace ya algunos años, y también escribí durante mucho tiempo diarios personales, con tooodo lujo de detalles de lo que me pasaba, lo que me dejaba de pasar y lo que me esperaba que me pasase. Ahora prefiero confiar en mi memoria (más que nada por la pereza que me da) y solamente escribo ocasionalmente algún pensamiento o algún hecho de mucha mucha importancia.
    Un saludo Paula ;)

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  8. zaou : yo soy más como tú, de apuntar pequeños pensamientos que me llegan de repente. Ahoraprcuro apuntarlos en un cuadernito que me regalaron, pero más lo pruro que lo hago.
    Paula voy a echar un vistazo a tu blog, prque es la primera vez que entro, a través de Zazou, y me ha gustado tu entrada

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  9. Sí he leído a Ana Frank, el año pasado, y el libro me gustó bastante. A pesar de estar escrito por una niña, supo expresarse de una forma impecable. Creo que es uno de los libros sobre el sufrimiento judío, que más claro deja por lo que tuvieron que pasar.

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  10. Hola Paula.Pues el diario de "Ana FranK" fue junto a "Cumbres borrascosas"de los primero libros "serios" y adultos que leí.La verdad es que no llevo un diario.Utilizo solo una agenda para cosas prácticas.Pero recuerdo que cuando era pequeño a las niñas les regalaban un diario con un candado.Esa sana costumbre de llevar los pensamientos y acontecimientos del día en un diario se está perdiendo.Y es muy adecuada para el autoconocimiento y el crecimiento integral de la personal.
    Todavía no he leído a Susan Sontag.Acepto recomendaciones.

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